“Gracias a la cirugía gratuita que recibí hoy puedo caminar y jugar”

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 lynnie hernandezLynnie quiere ser veterinaria, pero podría ser artista, literata o una gran deportista. Tiene muchas habilidades y una notable solvencia al hablar y redactar, pero son su alegría, entusiasmo y positivismo los que sin duda alguna constituyen su más grande virtud.

Lyli, como cariñosamente la llaman sus padres, tiene 11 años y una vida feliz. En junio del 2014 fue intervenida quirúrgicamente en el Hospital de Niños Dr. Roberto Gilbert de la Junta de Beneficencia de Guayaquil, con diagnóstico de genu varo o huesos arqueados, que es una deformación presente, en su mayoría, en pacientes con síndrome acondroplástico (trastorno genético que afecta al crecimiento óseo y causa el tipo más común de enanismo).

Dicha alteración en sus piernas, le imposibilitó a Lyli caminar de manera normal desde los primeros años de edad. "El regalo más grande que una niña de mi edad puede recibir es poder caminar sin dolor", expresó la pequeña.

"Tuve que inscribir a Lyli en una escuela cercana a nuestro hogar, ayudarla a transportar la mochila y subir los escalones con mi hija en brazos, para llegar al salón. Este proceso lo realizaba a diario durante el ingreso y salida escolar", expresó María Elena Noboa, madre de la pequeña.

Han pasado 7 meses de la exitosa cirugía y recuperación, después de 8 años de malestares constantes y dos de tratamientos clínicos. Hoy, Lyli puede jugar y caminar sin ningún impedimento. Los dolores han desaparecido en gran porcentaje, sus rodillas ya no sufren y aunque aún se apoya de una silla de ruedas para los trayectos más largos, no tiene que usar zapatos ortopédicos ni aparatos que limiten el camino de sus sueños.

"En mis dibujos reflejo a mi familia como fuente de inspiración y ejemplo constante para seguir adelante con mi discapacidad que está llena de capacidades", expresó Lyli.