Con auditorio lleno se puso en escena la Obra de Teatro Soñar Soñar, en la que actúan 12 pacientes del Instituto de Neurociencias. Es la segunda ocasión que lo hacen en el mismo teatro Libertador Simón Bolívar, ex MACC. Entre los asistentes estuvieron representantes de ASVOLH, ACORVOL, Municipio de Guayaquil, la Reina de Nuestra Ciudad, María Fernanda González, público en general, quienes, manifestaron su admiración al esfuerzo puesto en escena por los pacientes de salud mental y la Unidad de Conductas Adictivas, UCA.
Más de trescientas personas ovacionaron la obra, por la escenificación y trasmisión de pensamientos; ideas y vivencias que sustentan la obra recogida por el grupo de pacientes del Instituto de Neurociencias que es el reflejo y la prueba fehaciente de que las alteraciones de la mente es una enfermedad más, que un paciente de la salud mental es capaz de desarrollar habilidades y destrezas, armonía corporal, recordar frases, representar un papel, que necesitan la oportunidad de hacerlo, la aceptación de la comunidad, pero que demandan mucho amor y atención.
Justamente, el cambio de nombre a Instituto de Neurociencias no sólo ha significado eso, también, la incorporación de nuevos métodos en el tratamiento, nuevas terapias, nuevos equipos con tecnología de punta, la apertura de nuevas áreas para la atención, lo que conforman un cambio y nuevos paradigmas para reinsertar al paciente de la salud mental a ámbito familiar, social y laboral, de ser el caso, como ya viene ocurriendo con alrededor de una decena de ellos, gracias a la apertura de empresas que reconocen el trabajo que se viene ejecutando en beneficio del paciente del Instituto de Neurociencia y a la visión de que es un ser humano con una enfermedad cierta o algún grado discapacidad.
Al final de la obra se presentó el documental “Cuando la mente baila”, cuya protagonista, Ana María Ricci, bailarina clásica profesional y ex profesora de ballet, es una paciente crónica del Instituto de Neurociencias. El documental que fue reconocido por el Festival Internacional de cine Documental “Encuentros del otro Cine” EDOC10. En él se narra las vivencias, deseos e inquietudes y la apertura que encontró en el Instituto de Neurociencias para hacer realidad su sueño, volver a enseñar la danza y el baile.
La emotividad y el sentimiento afloraron en los presentes que de pie aplaudieron la lucha de esta mujer que se perdió entre las sombras de los recuerdos y la realidad. Ana María y todo el elenco de la obra, recibieron el cariño, la admiración y el reconocimiento del público. Fue muy emocionante.