Fue fundado en 1892 con un legado de Don Agustín Coronel Mateus y una donación inicial de 20 mil sucres que hizo Don Manuel Galecio, en los terrenos que donó Francisco Aguirre Jado, es decir, bajo la fórmula que entonces funcionaba para sostener la obra benéfica: donación, legado, filantropía, acciones que con el tiempo se han ido perdiendo y, la Junta, se ha tenido que buscar medios alternativos para poder sostener la cada vez mayor demanda de la amplia labor social que realiza en beneficio de los que más lo necesitan.
Así, el Hospicio Corazón de Jesús, desde sus inicios fue destinado para atender a los ancianos, hoy adultos mayores. Fue administrado por las Hermanas de la Caridad. Su evolución ha sido importante gracias al altruismo de guayaquileños y H. Miembros que entonces conformaban la Junta como Don Vicente Santistevan Elizalde o de la dama María Luque de Rohde que en memoria de su esposo Guillermo Rohde Arosemena, donó los recursos para la construcción de un pabellón, tal como ocurrió con la donación que en memoria de Don Enrique Maulme Barrat se hizo; o, el importante aporte del filántropo Don Enrique Maulme Gómez, quien fuera Inspector de esta dependencia.
Su construcción original fue de madera de pino, fachada que fuera desmontada y reconstruida parcialmente en el paque Histórico como muestra de la arquitectura de inicios del siglo XIX pero sobre todo, del desprendimiento, altruismo y filantropía de los guayaquileños para dar protección a los ancianos.
Hoy, al cabo de 120 años, un total de 246 asilados, entre hombres y mujeres de la edad adulta, son los que aprovechan cada uno de los ambientes construidos para su estancia, ambientes de tranquilidad, de comodidad, espacios para caminar, compatir, meditar. Mientras, un grupo de personas del área administrativa, enfermería, trabajo social, laboran en función de las necesidades de alimentación, con una dieta balanceada, con actividades recreativas, atención primaria de salud, reuniones familiares, elaboración de manualidades, entre otras, que los mantienen activos y útiles.
Para conmemorar tan significativa fecha se van a realizar charlas, exposiciones, presentación de un grupo de baile y canto, una sesión solemne de aniversario, en la que se efectuará un reconocimiento a quien por más de cuatro décadas le ha dedicado tiempo y mucho esfuerzo para mantener el Hogar conforme la escala de valores de la Institución. Así mismo se reconocerán a dos de los colaboradores más destacados por su aporte, entrega al cuidado de los adultos mayores.
Se tiene prevista la incorporación de una nueva área para desarrollar la Comunidad Dorada y ponerla al servicio de los ecuatorianos.