De acuerdo a la disposición del Ministerio de Educación, el último viernes de cada mes todos los establecimientos educativos a nivel nacional deben realizar, al interior de cada plantel, un simulacro de sismo, que contará con la participación de estudiantes, profesores y personal administrativo.
Ante esto las Unidades Educativas de Junta de Beneficencia de Guayaquil, José Domingo de Santistevan y Santa Luisa de Marillac, se preparan y ejecutan sus planes de prevención, que no solo incluyen la correcta evacuación de los estudiantes hasta los sitios previamente definidos como seguros; sino también la implementación de señaléticas, conformación de brigadas, y adecuaciones en sus estructuras físicas, capacitación en el uso y manejo de extintores.
Para el efecto, se han conformado brigadas de evacuación integrada por estudiantes y docentes, quienes guiarán a los estudiantes a los puntos de encuentro, hasta que sus representantes vayan a retirarlos.
El Ing. Marzolini Miranda, Jefe de Seguridad integral de la oficina central de la Junta de Beneficencia de Guayaquil, destaca que estos simulacros buscan fortalecer las capacidad de respuesta de estudiantes, docentes, autoridades educativas, personal administrativo) ante una emergencia y un proceso de evacuación en el caso de ser necesario.
Miranda destaca que para lograr todas este objetivo es primordial el apoyo de las autoridades de las unidades educativas para realizar las mejoras; “En el Santistevan venimos trabajando desde el año anterior, se señalizaron varias áreas y se incorporó un sistema de alarma de incendios; en la Unidad Educativa Santa Luisa de Marillac se está mejorando la señalética, y se está trabajando en la instalación de una escalera de emergencia”, señala.