Más de 60 mil pastillas de bromuro de piridostigmina de 60mg, conocida como Mestinón, fueron entregadas el día de ayer, domingo a 90 pacientes que padecen Miastenia Gravis. El medicamento donado es esencial para controlar los síntomas de la enfermedad que provoca un severo deterioro en el sistema osteo muscular, imposibilitando muchas veces a quien la padece.
Hasta la Fundación Nacional para la Miastenia Gravis Ecuador, FUNAMIGEC, llegaron desde Alausí, Machala, Ambato, Quito, Cuenca, Manabí y de muchos otros lugares del país, para recibir una dosis de esperanza para su salud. Ahí, el Dr. Luis Sarrazín Davila, en representación de la Junta de Beneficencia de Guayaquil, entregó gratuitamente el medicamento con el que los pacientes aseguraron tener su tratamiento cubierto por tres meses.
Rosa López fue una de las beneficiarias. Ella, llegó con su hijo Mauricio de 16 años, quien padece de miastenia hace 3 años. “Conseguir la medicina es muy difícil, es cara y no hay, peor en Alausí donde vivimos. Cada frasco de 100 pastillas, me ha tocado conseguirlo entre cien y ciento cincuenta dólares y somos pobres. Agradezco infinitamente que la Junta de Beneficencia nos obsequie esta medicina que mi hijo necesita para que no le de las crisis” comentó.
Otra de las beneficiarias fue Maritza Moya, llegó desde Ambato. De sus 36 años, la mitad de su vida ha vivido con miastenia gravis, y necesita tomar 12 pastillas diarias. “Las crisis son fuertes. Uno se siente muy débil, falta la respiración y se corre el riesgo de hasta morir si no tomamos el medicamento adecuado” manifestó Maritza y entre lágrimas, agradeció a la Junta de Beneficencia por donarles el medicamento que necesitan para sobrevivir“
La presidenta de FUNAMIGEC, Martha Vera, agradeció al Dr. Sarrazín y a la Junta de Beneficencia, por la ayuda social que han recibido. “Con esta donación sabemos que vamos a poder seguir el tratamiento con medicina de buena calidad hasta el mes de diciembre; y queremos pedir a la institución que nos siga apoyando en esta lucha por sobrevivir, con esta enfermedad que nos deteriora la vida” manifestó Martha a sus compañeros de lucha.