Samuel y Valeska de 4 y 7 años respectivamente, son unos de los primeros beneficiados de las cirugías gratuitas de trauma y ortopedia de alta complejidad que realiza la misión médica norteamericana Project Perfect World en conjunto con los médicos del servicio de traumatología del hospital de niños Roberto Gilbert de la Junta de Beneficencia, y que ahora se recuperan satisfactoriamente.
A Samuel le realizaron la reposición de tendones en ambos pies ya que padece de pie Equino varo, además padece de hidrocefalia y espina bífida. A su corta edad le han realizado 17 cirugías. “Él es un niño feliz dijo Carolina Ávalos, su mamá al verlo sonreír con los médicos. Esa es su manera de agradecer la atención que siempre recibe en este hospital” comentó.
Mientras que Blanca Álava, abuelita de Valeska quien está a su cuidado desde que nació también agradeció a la misión médica y a los directivos de la Junta de Beneficencia que les dieron la bienvenida a los médicos y visitaron a los pacientes que han sido intervenidos durante este fin de semana.
Ellos forman parte de los aproximadamente 75 pacientes que se beneficiaran gratuitamente de las valoraciones clínicas, cirugías y entrega de órtesis que realizan en esta semana los médicos norteamericanos.
De los 75 niños, veinte serán intervenidos quirúrgicamente para corregir malformaciones congénitas como displasia de cadera y de las extremidades inferiores mediante cirugías de alta complejidad que durarán hasta este viernes.
Project Perfect World liderada por el Dr. Matt Schmittz, tiene dos décadas haciendo esta labor social con la Junta de Beneficencia y vienen dos veces al año para ayudar con cirugías correctivas de trauma y ortopedia a niños de escasos recursos económicos y que requieran cirugías de alta complejidad.
Esta misión que está conformada por 25 personas entre cirujanos ortopedistas, anestesiólogos, enfermeras y voluntarios, permanecerá hasta el 16 de octubre en el hospital, no solo operando, sino también entregando órtesis como las férulas de polipropileno para niños con parálisis cerebral, mielomeningocele o las de Dennis Brown que son para niños con pie equinovaro.