El paludismo es una enfermedad parasitaria producida por el plasmodium y trasmitida por la hembra del mosquito Anopheles. Los síntomas son conocidos como la triada palúdica que consiste en fiebre, escalofrío y sudoración. Desde el 2007 la OMS declaró al 25 de abril como día Internacional del Paludismo.
"Presenta fiebre de 40°C. Tiene un periodo que no presenta síntomas, se produce luego de los primeros porque el parásito del paludismo al entrar en el ser humano, se multiplica y se distribuye a través del torrente sanguíneo. Este proceso dura, aproximadamente, 72 horas", explicó el Dr. Federico Cabrera, médico infectólogo del Hospital Luis Vernaza.
Si bien el paludismo en el Ecuador está controlado, existen zonas endémicas, de las provincias de la Costa, específicamente, en zonas marginales; y, en el Oriente. Para su prevención se recomienda la fumigación para erradicar los mosquitos o disminuir su cantidad. El mosquito anopheles tiene como hábitat las aguas sucias y estancadas. Se debe usar mosquiteros.
El Dr. Federico Cabrera, especialista, sostiene que para su tratamiento tradicional se usa los antibióticos de la familia de las quininas; pero en los últimos años el parásito ha demostrado resistencia al medicamento, por lo que se están haciendo estudios para encontrar otro medicamento antipalúdico.
El paludismo puede ser mortal, principalmente, si el parásito es del tipo falciparum. Además, siendo un parásito que viaja por el torrente sanguíneo puede afectar a otros órganos, produciendo falla hepática, anemia aguda, hemorragia masiva y paludismo cerebral.
Son escasos los pacientes de paludismo que se han atendido en los últimos años. "Pero hay que tomar las medidas de prevención para evitarlo", dice el Dr. Cabrera, quien agrega que el mosquito del paludismo tiene como una de las característica picar en la parte baja de las piernas y en cualquier horario.
La OMS, señala que cada año se producen más de 200 millones de casos de paludismo, la mayoría de los cuales no se diagnostican ni se registran. De esta cifra, se calcula que 660 mil personas mueren en todo el mundo, siendo los más afectados los niños menores de 5 años del África.