Desde hace 15 meses, llegó desde su natal Azogues Néstor Rodríguez, de 87 años a residir en el Hogar del Corazón de Jesús de la Junta de Beneficencia de Guayaquil, donde aprovecha su tiempo para hacer lo que le gusta.
"Desde que estaba en la escuela me gustaba dibujar y pintar, pero como tuve que trabajar desde muy pequeño, no pude continuar con mi afición a la pintura", expresó.
Ahora, disfruta del bienestar y la alegría que le proporciona la vida en el Hogar del Corazón de Jesús de nuestra institución. Ha participado en las obras de teatro, hace taichí, yoga, pero sobre todo, disfruta de pintar lo que se le viene a su imaginación.
"En el Hogar del Corazón de Jesús de la Junta de Beneficencia de Guayaquil hacemos muchas actividades, por lo que prefiero dibujar en la mañana porque de ahí asisto a los diferentes talleres junto a mis compañeros y por la tarde me gusta caminar por los jardines del hogar", comentó.
Uno de sus recientes dibujos es el logo de la Junta de Beneficencia de Guayaquil. "Este dibujo lo veo en muchas partes, pero me di cuenta que también estaba en las sábanas y me gustó por el significado que tiene y lo dibujé", comentó Néstor. "Representa el amor de la madre que cuida a su hijo que está enfermo", aseveró en tono muy suave.
Néstor sólo requiere de un papel, lápiz y lápices de colores para hacer su sueño realidad. Estos materiales se los ha proporcionado el Hogar del Corazón de Jesús de nuestra institución y más adelante le gustaría pintar con acuarela.