La aspiración del Hospital de Niños Roberto Gilbert es tener su propio equipo de médicos para que realicen cardiocirugìas pediátricas una por día, para ese efecto están los cardiocirujanos norteamericanos con una labor que lleva 10 años, “han dado la mano a gente que lo necesita y sobretodo a nos ayudan a capacitarnos en lo que hemos llamado programa de cirugías cardiovascular que debe empezar a ser casi autónomo para el próximo año. Lo ideal es que para el próximo año el Hospital ya comience ha hacer cirugías en formas individuales, por el momento necesitamos esta ayuda que es de muchísimo valor. Ellos trabajan en quirófano, en recuperación, en anestesia y en el camino vamos aprendiendo las diferentes maneras para manejar mejor a un paciente”, señaló el doctor Enrique Valenzuela, Director Técnico del Hospital de Niños Gilbert. Un total de 35 niños serán los beneficiados de estas operaciones que tienden a superar los problemas congénitos.
El Cónsul General de USA en Guayaquil, Douglas Griffiths, destacó esta labor solidaria que, gracias a la JBG se realiza, “es un programa de amigos y socios porque alrededor de 70 médicos y enfermeras están aquí trabajando en equipo con los socios ecuatorianos del Hospital de Niños Roberto Gilbert que están apoyando a nuestro equipo para brindar atención a los niños más necesitados y hemos dedicado por décima primera vez este contingente”, indicó.
Dos son los médicos norteamericanos que comandan esta misión de 70 profesionales entre médicos cirujanos, enfermeras, internistas, anestesiólogos, los doctores Steve Cyran y Jhon Myers, quienes hacen los chequeos previos, el primero; y las intervenciones quirúrgicas, el segundo.
Ambos manifiestan su satisfacción por la infraestructura y equipos del Hospital de Niños Roberto Gilbert. Myers acota que es la primera vez que están tanto tiempo, no visitan otras ciudades y lo que se busca es contribuir con su experiencia en la conformación del Centro de Cardiología Pediátrica.
“Son varias las patologías que se presentan, lo importante es corregirlas a tiempo, hemos desarrollado técnicas para tratar a los niños, rápidamente. Hemos desarrollado una serie de técnicas y manejos a nivel de cirugías y cateterismos para que sean utilizados como parte de las herramientas de estas cirugías, para que puedan operar a futuro a niños de pocos meses de edad y no esperar etapas de mayor desarrollo, es decir, hacer lo que nosotros hacemos normalmente”, acota el Dr. Myers.
Cabe anotar que anualmente se benefician 90 pequeños pacientes con estas operaciones de corazón, “la idea es hacer entre 150 a 180 operaciones y hacerlo nosotros y cada vez más”, señala el Dr. Valenzuela, quien acota que la experiencia que tienen con el grupo de médicos de Estados Unidos con los que viene trabajando hace 11 años, con los cirujanos cardiovasculares de Chile 3 y con los de California 6 años, acota. Indicó, además, que la cantidad de niños con patologías que anualmente tienen que operarse superan los 200 por año; “eso nos da la pauta de lo que se acumula cada año. Por eso hay madres que hasta por 5 años han venido insistiendo en operar a sus hijos, pero ahora les tocó; operamos dependiendo de la gravedad de cada paciente y tenemos la lista de espera. Pueden venir de Cuenca, Riobamba, basta que sean niños ecuatorianos y aquí lo atendemos con fe esperanza y tradición, no importa de donde sea.
Después que los médicos de USA retornan a su país, nosotros somos los responsables por los pacientes, quienes no pagan nada, lo más satisfactorio es recibir las gracias de una madre que llora por ver reestablecida la salud de su hijo, eso paga todo, señaló el Dr. Valenzuela