Se ha comprobado que los perros son animales sociales que responden a las emociones con gran sensibilidad. En el caso de terapias para niños que sufren de estrés post-traumático, el perro se convierte en su terapista. Saben escuchar y muestran un cariño incondicional. Los niños que presentan diferentes patologías físicas o mentales reciben muchos beneficios al relacionarse con niños los canes.
Por todo esto, la Inspectoría de Innovación y Satisfacción al Paciente de la Junta de Beneficencia de Guayaquil, incorpora Happy Dogs, un programa de perros de terapia y visita que asistirán acompañados de su fundadora Daniela Carrera, especialista en comportamiento canino.
El programa inició el 2 de mayo con los niños pacientes de la consulta Externa del Instituto de Neurociencias y se mantendrá como plan piloto en el mismo lugar todos los lunes y viernes de 08h00 a 09h30. Después se ampliaría la actividad para beneficiar a los pacientes del Hospital de niños Roberto Gilbert.
"Desarrollar la empatía, mejorar la capacidad de comunicación, desinhibir a las personas, romper la rutina, mejorar la socialización, brindar contacto físico, reducir la presión arterial y el estrés, son algunos de los beneficios que proporciona la terapia con perros" señaló Daniela Carrera.