Así lo hizo por los 477 años de fundación de Santiago de Guayaquil, la Junta de Beneficencia desarrolló una Casa Abierta, en el Malecón 2000, en la que se expuso a la comunidad los servicios que ofrece a través de cada una de las dependencias que la conforman: Hospitales, Unidades Educativas, Asilos para ancianos, hogares para niñas y cementerios.
El objetivo fue presentar a la comunidad las diferentes dependencias con la que realiza su labor social desde 1888 en directo beneficio de los sectores menos favorecidos de la ciudad y del país. El público asistente tuvo la oportunidad de apreciar y conocer más de cerca a varios de los voluntarios que como Miembros dirigen la Institución, a sus funcionarios pero sobre todo, los diferentes servicios que en el ámbito de la salud, educación asistencia social, cementerio y loterías, estuvieron en este evento que convocó a cientos de ciudadanos.
En la inauguración el Dr. Werner Moeller señaló que “por primera vez se está viendo la Junta de Beneficencia de Guayaquil en sus servicios directos, con todas sus dependencias. La Junta por ser la institución más guayaquileña que hay, vive los problemas de su comunidad las 24 del día y los 365 días al año y aquí estamos para servir a la gente más necesitada”, enfatizó.
En los diferentes stands, los visitantes aprovecharon para que el personal de médicos y enfermeras les realicen la toma de la presión arterial, la prueba de glucosa, el control de peso y talla. Además, de escuchar las importantes charlas que sobre diabetes, nutrición, colesterol, dislipidemia e hipertensión se dieron en los stand de los hoispitales Luis Vernaza, Enrique C. Sotomayor, Roberto Gilbert e Instituo de Neurociencias.
En las presentaciones artísticas intervinieron los estudiantes de sus Unidades Educativas: Santa Luisa de Marillac y José Domingo Santistevan; los pacientes del Instituto de Neurociencias presentaron una parte de la obra Soñar Soñar, estuvieron los coros del Hospital Luis Vernaza y del Hogar Corazón de Jesús; entre otras actuaciones que amenizaron la soleada mañana en la que Guayaquil y sus habitantes disfrutaron de una actividad en la que se puso de manifiesto el trabajo, la responsabilidad social y, sobretodo, la solidaridad de una Institución que desde hace 124 años viene trabajando para brindar atención a quienes más lo necesitan.