Un ambiente de alegría, emoción y agradecimiento se vivió en el Hogar del Corazón de Jesús de la Junta de Beneficencia de Guayaquil durante el homenaje a las madres en su Día Internacional que congregó a más de 200 adultos mayores residentes del Hogar.
"Como todos los años, el objetivo es no dejar pasar esta fiesta tan importante, tanto para celebrar a nuestras adultas mayores residentes que son madres y también para que ellas puedan hacerles un homenaje a sus mamás, aunque no las tengan físicamente con ellas", expresó Camila Valdivieso, Gerontóloga del Hogar del Corazón de Jesús.
El toque musical estuvo lo puso la banda Guayacos Band que tocó canciones dedicadas a las mamás, quienes no pararon de aplaudir. Artistas mayores presentaron poesías, pensamientos, cantaron las personas de la tercera edad que pertenecen al coro de la iglesia del Hogar, también se pudo disfrutar de una parodia del Dúo Pimpinela, todo esto levantó el ánimo de los asilados, quienes de inmediato se pararon a bailar.
Magdalena Ávila de 74 años forma parte del coro de la Iglesia del Hogar desde hace año y medio. Para ella ha sido lo mejor participar en el coro porque eso le llena el espíritu y de manera muy especial en este día en el que ha podido cantarle a su mamá que ya falleció.
Jenny Silva de 56 años que participó en el Dúo Pimpinela comentó que para ella el día de la madre es algo muy bonito y agradece por el agasajo que les realizan a las madres, siempre recuerda a su mamá, y así mismo le ha transmitido a su hija los valores que su mamá le inculcó. "Estoy participando en actividades que nunca he participado y me están ayudando a que no me sienta desanimada", señaló.
Además de la presentación artística, otras residentes del Hogar estaban vendiendo bisutería. Marlene Milena de 78 años es una de ellas. "A mí toda la vida me ha gustado la bisutería y ahora se trata de colaborar aquí. Nos alegraron este día con tantas canciones lindas también", aseveró.
Camila expresó que este evento por el día de la madre llenó de alegría el corazón de todos los residentes del Hogar. El romperles la rutina, integrarlos con los otros compañeros, tiene un efecto terapéutico, esto permite que mejore su adaptación porque se sienten parte de un lugar. "Esto es muy especial para ellos. Se activa también la parte cognitiva de estar alerta, ver qué presentación hay, escuchar la música", señaló.
