Hacer regalos de manera repetitiva, poner la mano en el hombro, hacer chistes obscenos, verbalizar fantasías sexuales. Son prácticas que podrían ser consideradas como acoso sexual en el entorno laboral que puede perjudicar a personas de ambos sexos.
En este contexto, el área de Seguridad y salud integral de la Junta de Beneficencia de Guayaquil organizó la charla denominada “Delitos sexuales en el ámbito laboral”; como parte del cumplimiento de las actividades correspondientes al programa de prevención de riesgos psicosociales de la Institución. La charla contó con la colaboración de Miguel Garay, Abogado del Departamento legal de la entidad
Garay explica que el elemento básico que debe existir para que se configure este delito es la relación de poder en el ámbito laboral. “Es el superior jerárquico que exige un favor sexual, y lleva de manera implícita la amenaza; puede ser a hombres o a mujeres. El trabajador debe denunciar y demostrar este tipo de situaciones”, señaló.
Recomendó además que a nivel general hay que tomar conciencia del problema para que nadie abuse del poder que tiene dentro de cualquier Institución.