La Unidad de conductas adictivas (UCA) del Instituto de Neurociencias (INC) de la Junta de Beneficencia, implementó dentro de su esquema terapéutico el servicio de panadería y comedor, un ambiente de trabajo que nace de la necesidad de la rehabilitación y reinserción laboral de los pacientes con trastorno adictivos.
La idea, explica el Dr. Alejandro Valdevila, jefe de hospitalización del INC es que, durante los seis meses de tratamiento en la UCA, el paciente adquiera habilidades laborales con regulaciones de horarios, obligaciones directas y de cumplimiento de normas de producción, que son básicamente los aspectos en los que las personas adictas tienen conflictos.
“Para el efecto, una empresa privada proveedora de la materia prima nos facilita dos panificadores que capacitan dos veces por semana a los pacientes en el arte de la panadería cuyos conocimientos son supervisados y evaluados durante todo el proceso”, señaló Valdevila.
Este proyecto se une a UCA CAFÉ, que funciona como otra de las iniciativas del Instituto de Neurociencias que buscan motivar a los pacientes en su tratamiento contra las adicciones, desarrollar su implicación y compromiso, e indirectamente mejorar su satisfacción personal, y su calidad de vida.
La Unidad de Conductas Adictivas funciona desde hace 11 años y tiene capacidad para 20 varones y 13 mujeres que son atendidos por especialistas en el manejo y tratamiento de las adicciones, que intervienen en el proceso de desintoxicación, adaptación, terapias recreativas, ocupacionales, vivenciales y otras que conllevan a que el paciente se rehabilite con habilidades y oficios que puedan desempeñar en su vida diaria.
Según sus estadísticas de la Unidad de Conductas Adictivas, desde el 2011 al 2021 se han atendido más de1500 pacientes, la mayoría varones.
